Algunos jóvenes del Movimiento Calasanz pudieron disfrutar de una tarde compartida con jóvenes de otros movimientos religiosos y con los Hermanos de Taizé en los que pudieron conocer un poco más de cerca la realidad de ellos.
A continuación tuvo lugar la cena solidaria cuya recaudación iba destinada a Caritas Diocesana para la ayuda de los refugiados en Siria.
Y para finalizar, por la noche, en la Catedral se realizó una oración de Taizé en la que se tuvo muy presente los tristes sucesos cometidos el viernes en París y donde niños, jóvenes y mayores rezaron por la Paz en todo el mundo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario